Capitulo 13

Esperamos que os esté gustando y se admiten comentarios . Gracias por leer : )

Habíamos acabado pasando un día genial, con altibajos por mi parte ya que Dougie todo era hacerle caso a Alex e incluso ella se había dado cuenta en nuestra pequeña sesión improvisada de fotos.

Cuando ya nos íbamos a acostar empezamos a medio discutir de nuevo Alex y yo al ver las fotos y acabé confesando lo evidente: Dougie me gustaba y me gustaba mucho. Después de la euforia del momento nos decidimos por irnos a dormir, ese día había sido muy especial y cansado y el día siguiente no iba a ser menos, los chicos nos iban a enseñar en condiciones la ciudad y los lugares que más les gustaban.

No podía dormirme, tenía demasiadas cosas en la cabeza y la vibración del móvil de Alex me hizo despejarme totalmente. Ésta se levantó y salió con cuidado de la habitación, suponía con quién estaba, pero no quería ni imaginármelo, mi imaginación era demasiado poderosa. Después de unos minutos que me parecieron horas apareció por la puerta y me dijo que había ido al baño. Que mal mentía. Ya hablaríamos al día siguiente, prefería dormir antes que comenzar otra discusión.

A la mañana siguiente me levanté antes que ninguna de las dos, así que bajé a preparar el desayuno. Cogí una taza y leche y la llevé al microondas para calentarla.

-¿Te importa prepararme una para mí también? Es que estoy un tanto dormido y puede que me equivoque con la sal y el azúcar-dijo Danny con una sonrisa al entrar en la cocina.

-Claro, no te preocupes, ¿leche no?-dije mostrándole el bric, asintió y empecé a prepararle el desayuno a él también. Puse el microondas en marcha y me giré para hablar con él pero calculé mal la distancia, pues se había trasladado hasta estar justo detrás de mí y choqué con él.

-Perdona, no te había visto-me separé un poco y le miré a los ojos.

-Vaya, sabía que te gustaba Doug, pero tanto como para volverme invisible, sí que tienes que estar pillada sí…

-No te equivoques tanto Jones, que no es para tanto, además, creo que tengo que empezar a olvidarme, y él, obviamente, ya ha empezado a olvidar a Frankie, aunque no exactamente como estaba planeado…-bajé la cara y él me la cogió con la mano para que le mirase de nuevo.

- No seas tonta, sería idiota si no se fijase en ti, cuando le dije lo que hablamos..

-Qué!?¿Qué le dijiste lo que hablamos? ¿Pero tú estás loco? Madre mía, ya no va a volver a hablarme, se va a pensar que estoy loca y soy una obsesa celosa, ¡seguro!-comencé a hablar en voz más alta cortándole, me cogió de los brazos intentando tranquilizarme.

-Tranquila por dios, tranquilízate que no es para tanto-dejé de hablar y de decir cosas sin sentido dejándole hablar-a ver, sí, se lo dije, pero solo para ver cómo reaccionaba y sí, también le hace gracia tu amiga, pero no solo ella… aunque me arrepienta de decir esto, tú también le gustas, le haces gracia,…-conforme dijo eso bajó la mirada, cosa que no acababa de entender.

- ¿Pero qué dices? No creo que sea así además, ¿por qué te ibas a arrepentir?-alzó la mirada y se fue acercando a mi hasta quedarse muy cerca-ya te lo he dicho, porque sería idiota si no se fijase en ti-dicho esto se inclinó hacia mí dudando un poco y luego arrancó hasta rozar sus labios con los míos.

Cerré los ojos y me quedé parada. No podía ser. Danny tenía novia y, de hecho, sabía lo que había, pero por alguna razón no me separaba de él, hasta que escuchamos un ruido en la cocina y nos separamos rápidamente.

El ruido provenía de la persona que acababa de entrar en la habitación, acompañada por el “clinc” de microondas. La leche estaría hirviendo y mi cara estaba roja como un tomate. Sí, la persona que se encontraba al otro lado de la cocina era Dougie y su cara lo decía todo. Se quedó parado y salió de la cocina de vuelta a arriba, ya que escuché un portazo. Miré a Danny y solo me dijo: “ves, lo siento, de verdad, ves a hablar con él” y no pude hacer otra cosa que subir las escaleras. Llamé a la puerta y giré el pomo entrando en la habitación de Dougie.

-¿Puedo?-al no escuchar nada pasé-Doug, yo…

-¿qué? ¿Sabes que tiene novia?-dijo alzando la vista de la guitarra que tenía entre las manos-no me esperaba esto de ti sabes…-me lo quedé mirando sin poder creerme lo que oía.

-¿Qué no te esperabas esto de mí? ¿Acaso sabes cómo soy? No me conoces, no sabes nada de mí, de hecho, has optado por no querer saber nada más de mí, mientras que Danny, con o sin novia, se ha preocupado por saber al menos cómo estaba, tú directamente pasaste a Alex en cuanto la viste por mucho que yo te hubiese ayudado o no a olvidarte de tu ex con lo de las fotos, que me parece genial, pero ha sido exagerado ¿no crees? Un poquito de disimulo aunque sea, que lo de ayer por la noche ya fue exagerado-dije soltándolo todo de una. Su cara cambió por completo y hasta yo lo noté.

-¿Lo sabes?-no sabía a qué se refería, pero no me dio tiempo a contestarle-mira, yo estoy muy confundido, no sé qué me pasa, pero la besé y no sé por qué, pero sigo igual o más liado que antes, desde que habéis entrado en mi vida todo se ha vuelto del revés, antes tenía claro cómo hacer las cosas, simplemente vivía sin sentir nada, inmune a cualquiera, desde que ella me dejó no tenía ganas de nada, pero primero llegaste tú, con tu sonrisa y desparpajo, y me hiciste reír, me hiciste pensar que había vida después de Frankie, y luego apareció Alex, y congeniamos muy bien y luego Danny me dijo que te gustaba y ¿por qué no decirlo? me acojoné, no sabía nada de lo que sentía, tenía miedo de mí, de sufrir, y ahora estáis vosotras dos, que sois amigas, pero no puedo evitar sentir algo cuando te veo, al igual que no puedo evitar sentir algo cuando la veo-aquello me estaba doliendo en el alma, era una de cal y otra de arena, pero me dolía saber que sí, que por Alex sentía algo y que, además, la había besado, pero continué escuchando-me alejé de ti pensando que, si no estábamos juntos no sentiría nada, que me decantaría por Alex o por nadie, pero cada vez que estabas alrededor riendo, escuchaba tu risa y quería ser la persona que te hiciese reír, igual que cuando Alex te hacía la foto quería estar a tu lado, pero por otra parte lo evitaba, pero no puedo seguir así-dejó la guitarra encima de la cama y se acercó a mí pero le paré.

-No Doug, así no, y menos con lo que me acabas de decir. Puede que me gustes, no te lo niego, pero no quiero ser segundo plato, y menos tercero. Lo siento, pero tendrás que aclararte por tu cuenta, y quiero que sepas que a nadie más que a mi le gustaría que esta escena hubiese acabado de otra manera, pero no puedo-me giré para que no viese caer una lágrima por mi mejilla y me fui hacia mi cuarto donde Alex y Sam se acababan de despertar. Me vieron la cara y se acercaron a mí.

-Alex, lo siento, sé lo que pasó anoche, no te preocupes, pero quiero que sepas que no tienes que hacer nada que no quieras, bésale cuanto quieras, no me importa, o bueno, sí me importa pero dentro de un tiempo espero que no lo haga-otra lágrima cayó por mi mejilla, y otra más y otra más y ambas me abrazaron consolándome, sabiendo lo que dolía un corazón roto.

-Beth, ya te dije que no me gustaba, bueno sí, es mono y tal, pero ya está, quiero que sepas que yo no hice por besarle, nunca interpondría a un chico entre nosotras-dijo mirándome a mí y luego a Sam-aunque claro, para interponerse entre Sam y Tom, hace falta un milagro eh-eso me hizo sonreír hasta que Sam me preguntó-oye, pero cómo que te has enterado, ¿qué ha pasado abajo? Que hemos escuchado un portazo y todo.

Y ahí es cuando les conté todo lo que había pasado desde que me había levantado esa mañana, nunca hubiese pensado que en unas horas pudiesen pasar tantas cosas.